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Los propietarios de una casa promedio podrían ahorrar entre $1250 y $1450 dólares al año en impuestos.
Laredo, Texas- Durante las elecciones de noviembre, más del 80 por ciento de los votantes de Texas aprobaron más de $18 mil millones de dólares en recortes de impuestos a la propiedad, sin embargo, las leyes respecto al tema son complejas, por lo que existe la confusión sobre cuándo se reflejará en los bolsillos y en qué cantidad.
Los propietarios de viviendas pagan generalmente un predial que se divide en impuestos escolares, impuestos por servicios de la ciudad y un impuesto por los servicios del condado -municipio-. Aquellos que pagan impuestos sobre la propiedad para servicios educativos, ya sea a través de un depósito en garantía hipotecario o directamente al tasador-recaudador de impuestos de su condado, calificarán para recibir ahorros. Pero los inquilinos no están incluidos en esto, ya que los dueños no tienen obligación de transferir ningún ahorro.
Además, la exención de vivienda familiar solo calificará para propiedades que sirven como residencia principal, es decir, aquellos que tengan varias casas, no podrán obtener este recorte con todos sus predios.
Los impuestos a pagar se determinan aplicando la tasa fijada por el gobierno al valor de tasación de la vivienda u otra propiedad.
De acuerdo con el tasador jefe de Bowie Central, Mike Brower, los propietarios de viviendas en el condado de Bowie, que incluye Texarkana y compraron en 2021 o 2022, ahorrarán entre $250 y $300 dólares al año en impuestos.
Los propietarios pueden verificar fácilmente el ahorro que obtendrán con su distrito de tasación local o con la oficina del tasador-recaudador de impuestos.
Quienes pagan impuestos a través de una cuenta o fondo de depósito en garantía con sus prestamistas hipotecarios deben comunicarse con su prestamista. Las empresas deberían notar un superávit en los impuestos pagados y hacer una de dos cosas: reembolsar el dinero en cheque o transferir los pagos al próximo año y recalcular el pago mensual, dijo Brower.
La principal confusión sobre el tema radica en que en años pasados, cuando la Legislatura tomó medidas al respecto, no proporcionó orientación sobre cómo las entidades debían calcular los impuestos adeudados. Entonces dependía de cada entidad, y eso creo confusión entre los contribuyentes.
Sin embargo, este año la Legislatura alentó a las oficinas tributarias a enviar proyectos de ley basados en las nuevas leyes con opción a que proceder según ellos quisieran. De esta manera, algunas entidades esperaron hasta después de las elecciones para enviar los cálculos finales a cada propietario derechohabiente; otras ciudades y municipios, enviaron ya sus cálculos de impuestos durante noviembre como si las enmiendas hubiesen sido aprobadas con la sola aclaración de que los cálculos podrían modificarse.
Créditos: elfinanciero.com.mx
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