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Migrantes frustrados enfrentaron cortes de agua y electricidad luego de intentos fallidos de forzar la entrada a EU. La incertidumbre y la falta de recursos llevan a algunos a considerar la reubicación.
Laredo, Texas.- La semana pasada, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos -CBP- reanudó la programación de citas para solicitar asilo en Estados Unidos por medio de la app CBP One en el puerto de Laredo, lo cual ha provocado que los más de mil 500 migrantes que llegaron a Nuevo Laredo con el propósito de cruzar con solo presentarse en el puente, regresen a un estado de espera.
El pasado 22 de junio arribó a Nuevo Laredo el primer grupo de migrantes originarios principalmente de Venezuela, quienes comentaron que era posible que tras la cancelación de citas en Laredo, pudieran ser procesados sin hacer dicho trámite. Fue así como se corrió la voz entre las personas que se encontraban en refugios instalados en Matamoros y Monterrey, y para el domingo 25, ya habían más de mil 500 inmigrantes en dicha ciudad.
Desde entonces, las autoridades de migración estadounidenses, sin declarar nada formal al respecto, comenzaron a aceptar el cruce diario de decenas de personas. Para facilitar el procesamiento hacia EU, los migrantes se organizaron al marcar un número en su brazo para identificar el orden en que llegaron y respetarlo.
La situación se mantuvo de dicha manera hasta el pasado viernes, cuando tras la reanudación de la programación de citas por medio de la app CBP One en el puerto de Laredo, ahora vuelve a ser necesario realizar el trámite y los solicitantes en Nuevo Laredo regresaron a un estado de “espera”, tal y como habían pasado meses en otras ciudades.
Katherine Figueroa, una mujer venezolana que se encuentra en el área del Puente Internacional I de Nuevo Laredo, comentó para este medio de comunicación su consternación, pues de acuerdo con el número asignado, seguía ella en turno de cruzar para hacer su solicitud cuando se reanudaron las citas en la app.
“Yo soy el número 383, hasta el día viernes pasaron personas sin cita, a mi me tocaba entrar el día sábado, pero desde ese día no han ingresado más personas, desde el día sábado están ingresando personas con cita. Estamos esperando a que nos den una respuesta migración de México o de Estados Unidos porque en verdad no nos han dicho nada, no nos han dicho si ya no nos van a procesar así, no nos dan una respuesta en realidad”, expresó.
Cada día, la app CBP One abre el proceso de programar una cita a las 11:00 de la mañana, hay quienes han intentado por meses en México el conseguir una, pero como la mayoría son aleatorias, no les ha sido posible.
Edgar Gutierrez, un venezolano que actualmente se encuentra en el campamento temporal para migrantes instalado a unas cuadras del Puente Internacional I en Nuevo Laredo, es de los afortunados que pudo obtener una cita para los siguientes días y señaló su emoción por cruzar de manera legal hacia Estados Unidos tras tres meses de estar en Matamoros y luego dicha ciudad.
“Ya gracias a Dios salió la cita y ya la tengo programada para el 18. Estoy muy alegre, no hallaba ni como terminar de confirmar la cita porque me dio una alegría que no sabía cómo expresarlo”, dijo.
Otros migrantes más, cansados de estar durante varios meses varados en ciudades fronterizas de México a la espera de concretar una cita, decidieron la noche del martes intentar cruzar por la fuerza hacia EU por el puente, sin embargo no obtuvieron éxito.
A raíz de lo anterior, migrantes en el refugio temporal alegan que a manera de “castigo”, les cortaron el suministro de agua, energía e incluso baños por el mal comportamiento de unos cuantos.
“Yo no fui pero me enteré, y la verdad estuvo bien feo porque lo que haga uno, perjudica a los demás, se rechaza el hecho de que tomen esas decisiones porque estamos en un lugar en el que no es de nosotros, nos están ayudando… Nos dejaron sin agua, sin luz, en eso es lo que nos afecta que alguien tome ese tipo de decisiones, que no hagan caso, que hagan desorden, tú sabes que no les cuesta nada decir a los que están arriba ´dejémoslos sin agua, sin luz, sin baños´ y pues acá hay niños, hay ancianos, hay personas que no soportan igual el calor”, declaró Oscar Gutiérrez, un joven colombiano del refugio.
De esta manera, las más de mil personas que hay hasta el momento en el refugio temporal en Nuevo Laredo están a la espera de una cita para solicitar asilo. Hay quienes ya desertaron y prefirieron trasladarse a otras ciudades, aunque hay incertidumbre, no saben qué hacer por falta de recursos para seguir en espera o moverse de lugar.
HISPANIC GLOBAL NEWS / Adilene López
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